por Dra. María Carmen Buelga Otero

Las palabras son de gran importancia en el funcionamiento de la vida de las personas, como también lo es, el tipo de palabras que se utilizan en forma diaria en la intercomunicación con el entorno. Esta va a marcar la forma en que se establecen las relaciones interpersonales y laborales. 

Desde el primer momento de vida, somos parte de la sociedad y del grupo primario que es la familia. Esta, culturalmente cubre nuestras necesidades básicas, de alimentos, cuidados personales, educativos, y es, en esas instancias cuando las formas de comunicación son de gran importancia, ya que es la fase inicial de la construcción del lenguaje. 

Entendemos que las palabras son nuestros referentes y por ello, pueden ser grandes aliados en la construcción positiva o negativa de las interrelaciones personales, familiares, sociales y laborales. En la gramática tradicional la “palabra” (del latín parábola), es una unidad de la lengua que resulta fácil identificar en el habla y en la escritura. 

Las palabras son símbolos, lo que quiere decir que son referentes de los objetos que hay en el mundo y son un tipo de representación cognitiva con las que se asocian. Estos signos o caracteres se definen como un alfabeto determinado, donde la combinación de distintas palabras con su significado son las que forma un lenguaje o lengua particular. 

Al analizar la relación entre una palabra (forma fonológica) y el mundo exterior, se deben abordar tres aspectos: 

  • La expresión de la palabra. 
  • El concepto con el que se asocia o significado. 
  • El objeto al que se refiere o referente. 

El referente de una palabra puede ser múltiple, y esto, porque en el mundo pueden existir una gran cantidad de objetos que son indicados por la misma palabra. Sin embargo, expresamos que el significado de la palabra es único. En los distintos ámbitos de la sociedad la utilización de las palabras es un vehículo, para poder realizar una mejor comunicación interpersonal en un medio social y laboral. 

Por lo expuesto, la palabra es un conjunto o una secuencia de sonidos articulados, que se pueden representar gráficamente con letras y se los asocia a un significado. De ahí que toda palabra tiene un significado propio y el mismo va a estar de acuerdo a la cultura donde es utilizado, por esta razón, muchas veces el término no hace referencia a lo mismo, sino que tiene distintas significaciones. 

También en la mayoría de los idiomas hay palabras prohibidas, las que se las denomina tabúes. 

Es importante saber, que para conocer una sociedad o un ámbito laboral debemos analizar la forma en que se usan las palabras y así, comprender su lenguaje y el comportamiento de los integrantes. Por ello, entender el origen de las palabras que se utilizan en determinado contexto social-cultural-laboral, amerita conocer la historia de los mismos y sus ámbitos de desarrollo. 

Al observar nuestro entorno veremos que muchas veces se usan palabras que no se sabe su origen y significado, conocer el mismo permite saber porqué las empleamos y como pensamos. 

La comunicación es la mayor riqueza que tienen las personas para la construcción de las relaciones interpersonales y son varias las formas de realizarla. Hay que resaltar que pueden surgir problemáticas dentro del medio laboral y social al establecer una comunicación deficiente. El no ser claro al expresarnos o no realizar una adecuada escucha de la información que nos trasmiten, puede generar situaciones de conflicto y llegar a la agresión. 

Por eso, el uso de las palabras es de vital importancia en la vida y las acciones que las personas realizamos en nuestras relaciones interpersonales y sociales. De acuerdo al modo de expresarnos puede generar actitudes positivas o negativas entre los miembros de un ámbito laboral, familiar o comunitario. 

La familia tiene gran influencia en las palabras con que se expresan los integrantes, las que dan origen a actitudes que organizan los vínculos entre sus miembros, estos se repiten en los ámbitos laborales y sociales. 

Es importante considerar la naturalización de un lenguaje que muchas veces encierra palabras, que en un contexto determinado puede ser interpretado como una agresión y en otro carecer de importancia. Por esta razón, la comunicación que establecemos a través del lenguaje, va a ser el organizador de las relaciones interpersonales, dado que es el medio con el que nos comunicamos los seres humanos. 

Esta es una necesidad que existe desde el inicio de la humanidad y es la forma en que las personas comparten con otras y con el entorno. Al observar nuestro entorno, veremos que se usan palabras que no se conoce el origen y lo que expresan, conocer el mismo, nos permite saber por qué y para que las empleamos y así entender cómo pensamos. 

Si bien, las personas se relacionan diariamente con otras, en general no se reflexiona sobre la importancia de estas y los conflictos que pueden surgir de las mismas, si la comunicación no se realiza en forma respetuosa o sea con un lenguaje que aporte a relaciones positivas en el ámbito interpersonal laboral, puede originar situaciones de violencia. Violencia que se naturaliza y se consolida en las palabras, siendo estas la representación del pensamiento y la cultura de la persona. 

Expresamos el valor del uso del lenguaje, considerando que la mayor parte de la comunicación es verbal, pero también debemos conocer el lenguaje corporal-gestual y el tono (fonema) que tiene mucha influencia al momento de las relaciones interpersonales. 

La comunicación es la mayor riqueza que tienen las personas en las relaciones interpersonales y son varias las formas de realizarla. 

Hay que resaltar que pueden surgir problemáticas dentro del medio laboral al establecer una comunicación deficiente. El no ser claro al expresarnos o no realizar una adecuada escucha de la información que la otra persona transmite, puede generar situaciones de conflicto y violencia. 

Es necesario organizar una cultura del lenguaje positiva y con valores. Para ello, la persona debe tomar conciencia del uso que le da a las palabras en su cotidianidad con los demás. Entendiendo su valor y las acciones que originan las mismas, para contribuir en forma efectiva al ámbito laboral, familiar y social. Esto amerita generar una nueva cultura del lenguaje, que permita aportar a la construcción de relaciones interpersonales-laborales en forma positiva.